
Aquella noche follamos. Entonces, al salir del servicio ella giró hacia la izquierda para la mesa de estudio y yo me encaminé a la salida de la biblioteca. Y una vez en el césped mirando el vasto cielo no dejaba de preguntarme en qué carajos estaba fallando mi vida.
¡Directo al grano!
ResponderEliminarNo diré más.