jueves, 31 de marzo de 2011

Desde que era un crio...

Cosas que se hacen por "amor"

- Ya he andado dos kilometros en direccion contraria a mi casa solo por acompañarla.

- Ya he salido a la calle con la bici por si me cruzaba con ella...y lo he conseguido.

- Ya me vi envuelto en una pelea por amor.

- Ya escribi una carta, o dos, o tres...declarandome.

- Ya hice regalos sin tener un porqué.

- Ya dediqué un poema en publico.

- Ya regale un poema de Bequer a una desconocida solo por que me gusto su sonrisa.

- Ya le pedí de salir mas de 4 veces a la misma persona xD

- Tuve la suerte de que mi primer beso fuese robado y de sorpresa.

- Ya me he acostado con alguien sin hacer nada solo por que ella fuese lo primero que viese al despertar.

- Conocí el sexo sin amor, y entonces aprendí a valorar los besos con amor.

- Ya hice un acertijo matematico solo por ligar con una chica de ciencias.

- Ya aposté todas mis cartas por una persona y perdí.

- Ya conoci a alguien por la red que fue parte de mí.

- Ya tuve historias de una sola noche.

- Ya me he sentido triste por alguien que no me merecía.

- Ya me he sentido rechazado mil veces , y ya he rechazado a personas que merecian la pena.


Al fin y al cabo, no se trata del final sino de lo que encuentras mientras vas caminando. Y auqnue mucha de estas cosas empezasen desde que era un crío... es lo que encuentras al echar la vista atrás y pensar qué has vivido.

miércoles, 23 de marzo de 2011

Epitafio.

Esta historia es un fic que escribi con 16 años, mas o menos. Hablando con una amiga lo saque del baul de los recuerdos, si, ese que normalmente tenemos tan perdido. Nose porque rescato estas cosas, creo que es porque ahora mismo, cada vez que intento ponerme delante del papel, lo unico que me sale me parece de tan poca...luz? si, lo llamare asi, de tan poca luz que no merece la pena seguir escribiendo. Nose que era mejor si el antes o el despues pero ... en fin, es lo unico que hay por el momento.


Epitafio


Recordamos las ilusiones. Los te quiero, palabras que marcan la vida de las personas. Recordamos las sensaciones que sentimos, cuando amamos, cuando lloramos y aun los recordaremos cuando partamos. Aun sabemos porque nos tenemos que ir, y aun sabemos porque no nos hemos ido.

El sentimiento es tener la ilusión, el quererla, apreciarla, tenderle la mano y alcanzar nuevas metas. Reconozcamos la vida tal y como la tenemos, pues aun somos dueños de ella. Da pena ver que todo se nos a esfumado por rencor, por miedo, odio y misericordia, ya no tenemos en consideración los sentimientos que un día subyugaron la maldad y el odio. No reímos, ni abrazamos, ni soñamos. Ya solo existimos. Es una eterna agonía el saber que debes de actuar, que debes incluso saber que es lo que tienes que hacer. Aun sigo aquí, de pie, descalzo bajo la lluvia, mientras recuerdo aquella noche en la que nuestra estrella desapareció. Aun recuerdo, hoy, aquí sentado sobre mis rodillas, como me sentí en aquel momento.

Son recuerdos de una noche, recuerdos de un pasado. Añoro el ser feliz, mas sé que me esta negado. Recuerdo con ironía los días alegres de junio, bajo el sol, en el lago. Todo aquello ya murió. El amigable calamar mora ya solo en las profundidades, el bosque ya no es oscuro, es impenetrable. Del bosque que conocí ya solo quedan viejos recuerdos. Aun creo en las ilusiones, por mas que la vida a intentado quitármelas una a una, siento que debo creer en ellas.

Mi destino fue el que me marcaron mas, como dijo la persona a la que amargamente recuerdo esta noche, vivir en los sueños puede ser peligroso, porque nos olvidaríamos de vivir la realidad. Vivo en un sueño desde aquella noche en la que él murió. El colegio ahora esta solo, silencioso. Mañana todos se marcharan, y algunos quizás nunca vuelvan. La vida va a ser dura a partir de ahora. Ya lo es, por tu no estás. Pero podría soportar toda esta maldad, toda esta tristeza, toda esta culpa, si solo estuvieras tu aquí, para decirme palabras que me alienten a superarme, para poderte mirar a los ojos y ver que aun quedan cosas por las que vale la pena vivir. Veo todo eso y sufro, sufro porque sé, a ciencia cierta, que ya no estas aquí.

Lo mas duro es que ya no puedo sentir ni siquiera odio. Ni siquiera odio a la persona que te traicionó, que te quito la vida. No la odio simplemente porque ya todo da igual. Solamente queda una cosa por hacer y es enfrentar mi destino y los sentimientos en este punto no importan. El odio ya no es mas mi amigo, ni tampoco la esperanza. Muero en vida solamente porque en la vida tu ya estas muerto. Te fuiste demasiado pronto, cuando aun te quedaban cosas por transmitirme, por enseñarme, por concienciarme. El mundo te ha arrebatado demasiado pronto para mi gusto.

Aun no estoy preparado para continuar esta lucha, pero preparado o no, debo de hacerlo. Debo de hacerlo por tu memoria, por la de mis padres, por las de mis amigos. Por todos aquellos a los que se llevo la traición de alguien en quien confiaban. Mi sino esta escrito, no me queda elegir. Cada día que pasa es mas largo, y sé que debo de partir. Ahora el castillo esta en penumbra, solo, triste. Nadie juega por sus pasillos, la melancolía los inundo hace una semana. El tiempo es acorde con la tristeza del lugar. En la noche, la luna ya no brilla igual.

Demasiado me dejaste aquí para que yo pueda con todo ello, pero es mas grande aún lo que te as llevado con tu sombra. Te has llevado nuestra esperanza.

Y es que aun recordamos los días felices con tristeza, y aun te recordamos a ti. Nuestro guía.

" No es mas triste quien más llora, sino quien mas pierde cuando sonríe"

domingo, 20 de marzo de 2011

Diálogos perdidos.

- Quédate conmigo.

- Porqué?

- Porque ahí fuera no encontraras nada más, solo a mi.

- Me perdería mil vidas más como ésta sólo por el placer de volver a encontrarte, pero moriria antes de perderme las lagrimas que allá fuera me esperan.

- Quédate, te lo ruego.

- Aún eres un pez grande y tu estanque demasiado pequeño, morirás pensando las grandes cosas que pudiste haber hecho y nunca hiciste, y ¿ Para qué? Para consumirnos en un amor mediocre de personas incompletas? No...

- Dime qué debo de hacer, dime qué he de hacer por ti y te prometo que lo conseguiré.

- Madura, pequeño Martín, convierte tu pequeña pecera en un mar insondable donde tu seas el rey y todo el mundo, hasta quienes te odien, en el fondo te admiren. Complétate como persona para que en el momento de volver a encontrarnos las estrellas nazcan solas. Te amo y creo que te amaré siempre... te has llevado eso de mí, por eso nuestro adiós es más necesario que nunca, por eso nuestra historia...se queda aquí.


Y sin prisa, recogió sus cosas, y con una última mirada en el quicio de la puerta, se marchó. Y yo me quedé ahi, preguntandome mil cuestiones sin sentido que nunca encontraron respuesta, acariciando nubes como si fuesen su pelo y escribiendo éstas palabras que se ahogan día tras día en el olvido.

Mezcolanza.

" La inspiración viene cuando andas "

miércoles, 2 de marzo de 2011

Estamos en obras.

Estamos en obras, continuamente construyendo la gran melancolía de nuestra hipotética realidad. El germen de la duda, de las asperezas, de los desengaños, del fracaso es la pura innovación de la pulcra y negada servidumbre existente hacia la necedad del mundo.

Somos unos rocambolescos estúpidos que creemos, por encima de todo, el integramiento en el sistema. Incluso la mayor crítica hacia este es una herramienta propia de su estirpe, necesita de contradicciones para creer más firmemente en su causa. El rostro del desamparo, de los agujeros rotos, de las razones olvidadas y de la vacua sociedad ensimismada no es otro que el de nuestras propias relaciones. Muchas veces he pensado que, a la práctica, parece que vivimos para otras personas.
Que lo único nuestro, lo único que de verdad hacemos por nosotros mismos son las emociones momentáneas, el placer instintivo, la lucha anímica por las feromonas y el poder. Intentamos integrarnos en el sistema, como he dicho, y solo logramos dar golpes en puertas tan vacías como la nuestra propia.

El nexo de unión, la trasmisión de todo aquello favorable y meramente existente es la verdadera realidad, el verdadero cara a cara de tu propio yo con el yo del sistema. Aquellos que, en síntesis, logran captar su propia esencia y no desperdiciarla, sino transformarla hasta que, de tanto machacarla solo sea una catarsis propia compuesta de todas las mascaras posibles del sistema podrá comprender la verdadera esencia de él.